Creado en: abril 16, 2021 a las 06:27 am.

La Uneac: unida, diversa y plural…comprometida

En el año del VIII Congreso del Partido Comunista de Cuba (PCC) y del Aniversario 60 de la Uneac, sigue la organización de la vanguardia artística e intelectual cubana perfeccionando su quehacer, en esa misión indiscutible de ayudar a pensar la sociedad, en la medida que se desarrolla y defiende sus valores, como le enfatizó la fuerza política y dirigente superior de nuestro país, en uno de sus Congresos.

Si el PCC es el Partido de la Unidad y su actual Congreso el de la continuidad histórica, la Uneac defiende en sus seis décadas precisamente la Unión, como parte indisoluble de nuestra fuerza, que es también la de sus escritores y artistas, en diálogo constante con la creación y el proyecto social que construimos.

Uno de ellos es el Dr. en Lingüística comparada Alemán-Español, Ismael Írsula Peña, quien además de presidir la Comisión Permanente de Cultura Comunitaria, Patrimonio y Tradiciones de la organización, es presidente de la Sección de Traducción Literaria de la Asociación de Escritores y Secretario General del núcleo del PCC de esta última.

En documento Memoria de los Congresos de la Uneac, se define el papel de la misma, según la apreciación del Partido, como una Unión “renovada, fortalecida, unida, una Uneac diversa, plural que respete todas las diferencias que haya y que tenga como norma la unidad, la diversidad en la Revolución…” ¿Cómo se trabaja en ello, de acuerdo a su criterio?

Una UNEAC unida, diversa y plural no sólo ha emergido de sus congresos. Más que una apreciación del Partido, así fue soñada y propuesta por Fidel en el discurso pronunciado como conclusión de las reuniones con los intelectuales cubanos, efectuadas en la Biblioteca Nacional los días 16, 23 y 30 de junio de 1961 y que pasó a la historia como “Palabras a los Intelectuales”.

Para la historia de este país constituye un documento histórico con una actualidad asombrosa. Podemos afirmar sin temor a equivocarnos que la UNEAC se fundó y creció inspirada en la letra y el espíritu de las “Palabras a los Intelectuales”. En ellas Fidel anuncia su fundación:

Que se organice una fuerte asociación de artistas y de escritores que organizadamente contribuya con todo su entusiasmo a las tareas que les corresponden en la Revolución. Y que sea un organismo amplio, de todos los artistas y escritores”.

Desde entonces y hasta hoy han estado presente en la UNEAC la pluralidad, la diversidad y el respeto a la libertad de creación como dijo el Comandante en Jefe en su intervención:

La Revolución no puede pretender asfixiar el arte o la cultura, cuando una de las metas y uno de los propósitos fundamentales de la Revolución es desarrollar el arte y la cultura, precisamente para que el arte y la cultura lleguen a ser un verdadero patrimonio del pueblo”.

La UNEAC ha trabajado por mantener estos principios fundacionales en su ejercicio como asociación artística revolucionaria. En cuanto a los calificativos de una UNEAC renovada y fortalecida se puede decir que el proceso de renovación está en pleno desarrollo. La continuidad está garantizada con la importante cantera que representa la membresía de la Asociación Hermanos Saíz, la organización de los artistas y escritores jóvenes con la que se está trabajando estrechamente. La UNEAC sigue siendo la vanguardia artística y ha cuidado a través de un riguroso principio de selectividad que a ella ingresen creadores con una obra reconocida.

Sobre la Unidad: Hemos logrado mantener en la UNEAC la unidad dentro de la diversidad. Pero sabemos que la unidad no solo atañe a la comunidad de escritores y artistas. La unidad dentro de la UNEAC tiene un impacto en la unidad del pueblo, la Patria y su Revolución. La unidad fue uno de los mensajes principales del líder histórico en “Palabras a los Intelectuales”:

“…La Revolución no puede renunciar a que todos los hombres y mujeres honestos, sean o no escritores o artistas, marchen junto a ella; la Revolución debe aspirar a que todo el que tenga dudas se convierta en revolucionario; la Revolución debe tratar de ganar para sus ideas a la mayor parte del pueblo; la Revolución nunca debe renunciar a contar con la mayoría del pueblo, a contar con todos los ciudadanos honestos…”, dijo Fidel en aquella ocasión.

Para nuestro entrevistado, la unidad se ha logrado también a través del tiempo mediante un constante diálogo entre el gobierno, el partido y los creadores. Con los encuentros de junio de 1961 en la Biblioteca Nacional, Fidel promovió un método, una práctica de diálogo con la vanguardia artística e intelectual cubana.

Cada discurso de Fidel en los congresos de la UNEAC, comenta, fueron nuevas palabras a los intelectuales que tuvieron en cuenta los tiempos y las circunstancias del momento. “Fidel ya no está entre nosotros. La nueva dirección del país le ha dado continuidad a ese diálogo. El presidente Miguel Díaz-Canel estuvo en el IX Congreso y su discurso de clausura además de captar la esencia de las intervenciones de los delegados, se refirió a los pasos a seguir para sostener la cultura como sustancia medular de nuestra nación”.

Su discurso, agrega, resultó de gran impacto en el auditorio y luego en el pueblo que le dio seguimiento a través de los medios. “Tuve el privilegio de asistir como delegado y apreciar la acogida de la intervención de Díaz-Canel. En los comentarios entre los asistentes se hablaba incluso, de Segundas Palabras a los Intelectuales. Después del congreso se han mantenido los encuentros del presidente con los creadores donde han intercambiado sobre el cumplimiento de los acuerdos del cónclave y sobre otros temas de relevancia nacional”.

Ismael Írsula Peña

En los 60 años transcurridos después del mensaje a los intelectuales, prosigue Írsula Peña, se han cumplido gran parte de los planes de Fidel y su visión con respecto a la creación artística y literaria. Fidel estuvo siempre claro desde el inicio que la cultura era un elemento esencial de la Revolución Cubana y que ello conducía ineludiblemente a la realización de una profunda revolución cultural. La unidad ha acompañado la revolución cultural, que aún no ha terminado.

“La unidad y junto a ella la defensa de la Revolución, la Patria y el Socialismo, son hoy más necesarias que nunca. El escenario actual es mucho más complejo que en el momento de las Palabras a los Intelectuales. Y vale la pena recordar la alerta de Fidel en aquel momento, palabras que mantienen total validez en los momentos que vivimos:

“…Si alguna preocupación a nosotros nos embarga ahora, si algún temor, es con respecto a la Revolución misma. Y seguidamente Fidel se pregunta: ¿Es que nosotros creemos que hemos ganado ya todas las batallas revolucionarias? ¿Es que nosotros creemos que la Revolución no tiene enemigos? ¿Es que nosotros creemos que la Revolución no tiene peligros?.”

Si nos hacemos hoy, las mismas preguntas que formuló Fidel entonces, apunta el entrevistado, tenemos que responder que; ni los peligros dejaron de existir, ni tampoco han desaparecido los enemigos. “Hoy son otras las armas a las empleadas durante la invasión a Girón que había sido recién derrotada cuando se desarrolló el encuentro de la Biblioteca Nacional. Las acciones enemigas continúan en la actualidad bajo otras modalidades. El bloqueo recién estrenado en aquellos momentos se ha recrudecido y las sanciones se han multiplicado. En los tiempos modernos que vivimos se libra una batalla campal en el terreno de las ideas, una dura lucha ideológica que tiene como nuevo escenario la internet y redes sociales. El enemigo principal sigue siendo el imperialismo yanqui que no ha renunciado a sus pretensiones anexionistas y se sigue apoyando en herederos de la dictadura de Batista. El negocio de la contrarrevolución ha prosperado y continúa sustentado por la CIA y las agencias de subversión contra Cuba; la USAID y la NED que han empleado en sus acciones más de 250 millones de dólares en las últimas dos décadas. Ese dinero se ha utilizado en todo tipo de maniobras y campañas contrarrevolucionarias”.

También el Partido valora a la UNEAC como una organización que le sirva a la nación cubana para pensar, desarrollarse y defender valores…. ¿Desde su Asociación cómo cree se contribuye a esa misión social?

La UNEAC como vanguardia artística es portadora a través de sus miembros de un caudal de ideas, saberes, experiencias y valores incalculables y preciso que sean compartidos con todos los órganos de dirección del país a todos los niveles y que lleguen a las jóvenes generaciones a través de sus obras, pero también en contacto directo con los jóvenes estudiantes y jóvenes trabajadores, en contacto directo con el pueblo.

La dirección del país está consciente de ello y no perderá esa oportunidad. En el caso de los escritores muchos de nuestros miembros están jubilados, pero no retirados y tienen toda la disposición de poner sus conocimientos, sus experiencias, sus saberes a disposición de las jóvenes generaciones.  Existen diversas modalidades de organizar esta transferencia: talleres, conferencias, discusiones, visitas a escuelas y centros de trabajo. Nuestros miembros están también presentes en el trabajo cultural comunitario en sus barrios y comunidades.

En la etapa que se avecina este contacto entre las distintas generaciones de revolucionarios, el intercambio y la batalla ideológica en las comunidades será vital en nuestro empeño por salvar la Patria y construir el país que queremos.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *