Creado en: julio 22, 2021 a las 02:53 pm.

Ha muerto la profe Nuria Nuiry

La profesora de muchas generaciones de cubanos y exrectora de la hoy Universidad de las Artes (ISA), Nuria Nuiry, falleció este jueves a los 87 años de edad.

Considerada una maestra con mayúsculas, mujer sabia y culta, transmitió siempre el legado martiano en todas las aulas donde enseñó. «Su clase trepidante entre el relato y el sustrato, entre el sentir y el pensar», confesaría en una crónica celebrando los 80 noviembres de la Doctora y catedrática, el reconocido periodista cubano José Alejandro (Pepe) Rodríguez, al sentirla como una pedagoga singular.

En el 2013 escribiría para el diario Juventud Rebelde: «Me veo 40 años atrás indócil, rebelándome en las aulas de aquella Escuela de Periodismo que ni soñaba Internet ni inmediatez alguna. Me veo absorto ante el despliegue ideográfico de Nuria Nuiry en la asignatura José Martí, (…) descubriendo la esencia del mayor de los cubanos».

«Sí, este alumno embelesado, fisgoneando las contrariedades y probables ingratitudes de los hombres que implica la gran causa; de paparazzi en la enigmática reunión de La Mejorana, o subiendo montes de Playitas a Dos Ríos», por eso el reconocimiento, aseguró, como «la mujer que alumbró con luz martiana los laberintos muchas veces enrevesados de toda una generación de aprendices de periodistas, en tiempos de tierna crudeza».

Y sigue el cronista describiéndola de figura frágil y extrema delgadez, y aunque con ojos tristes, capaz de conducir con ellos cual energía volcánica, hacia cualquier pasaje de la historia y la cultura que se propusiera. De ahí su celebración y lamento  al decir: «qué escasos esos maestros que burlan el tiempo y el espacio, y deben despertarte de tu ensoñación, porque ya terminó la clase, y vuelves tú al presente, a lidiar con tu tiempo y tu espacio».

Hoy, en este presente de julio ya no estará, pero su desaparición es solo física porque maestras como Nuria, y ya lo dijo uno de sus alumnos, hay pocas.

«En su aula, no cedió jamás a los populismos y las concesiones. Prefería a los insensibles y superficiales fuera de clase. Les condonaba la ausencia si fuera menester. Y la distancia necesaria que mantenía entre profesor y alumno, la tejía por debajo con el cariño y el respeto que sentía por aquel tropel de desordenados e inquietos absorbentes del saber y el sentir».

Graduada de Filosofía y Letras fue además crítica y ensayista. En su juventud participó activamente en la lucha clandestina y el movimiento de resistencia cívica contra la dictadura. Tras el triunfo revolucionario desarrolló una carrera de altísimos méritos en el campo pedagógico, a la par que se dedicó a la investigación literaria y del proceso de formación y consolidación de la cultura nacional.

Fue profesora de la Universidad de La Habana, directora de su Escuela de Periodismo, y de la Enseñanza Artística en el Ministerio de Cultura. Se desempeñó como rectora de la Universidad de las Artes, presidió la Cátedra Martiana del Instituto Internacional de Periodismo José Martí, además de integrar la Asociación de Escritores de la Uneac. 

Por eso desde la Unión de Escritores y Artistas de Cuba, llegue a sus familiares y amigos nuestras más sentidas condolencias.

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