Creado en: junio 8, 2022 a las 10:47 am.
Homenaje de la Uneac a Raúl González de Cascorro en el centenario de su natalicio
El legado literario del escritor, dramaturgo y pedagogo Raúl González de Cascorro (1922-1985), quien incursionó eficazmente la poesía, el teatro, la novela, el cuento y el testimonio, fue resaltado en el panel por el Centenario del natalicio del autor de libros como Aquí se habla de combatientes y de bandidos, Premio Casa de las Américas 1975, Árboles sin raíces y Una paloma para Graciela.
Organizado por la sección de literatura de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba en la provincia de Camagüey, al encuentro concurrió Genma Rodríguez, esposa del autor de una veintena de libros literarios (de cuya unión nacieron 8 hijos), junto con otros familiares y combatientes de la lucha de liberación nacional.
El escritor Benito Estrada, resaltó que Cascorro (Raúl González García), tuvo el honor de ser fundador de la Uneac (1961) y primer presidente del Comité Provincial de esa organización en Camagüey constituido el 17 de junio de 1978, reelecto hasta su fallecimiento.
El presidente de la vanguardia artística camagüeyana, Sergio Morales Vera, reveló que el autor del también libro de testimonio Emboscada y Masacre de Pino 3, caracterizó por su expresión martiana y cultivó otras manifestaciones artísticas como la interpretación musical y el dibujo.
Consideró que Gonzálezde Cascorro (toma como su segundo apellido el nombre de su pueblo natal, quien nació el13 de junio de 1922), es uno de los escritores camagüeyanos más premiados y que su obra está muy vinculada a la Revolución cubana y refleja de momentos muy relevantes como la lucha contra bandidos. Precisó que antes de 1959 la literatura de Cascorro transcendía las fronteras locales. Destacan: Vidas sin domingos. (Cuentos Grabados en Dagame de Carmelo), Motivos, (poemas 1946), Cincuentenario y otros cuentos (1952).
Es calificado por la crítica de la década de 1950 (Salvador Calvillo Madrigal), «como un magnifico pintor de tipos, ambiente y costumbres cubanos. Pero más allá de lo meramente descriptivo, aun por medio de un dialogo fiel, ágil, bien llevado, es también un disector de espíritus y un feliz buscador en los mares de la emoción. Hombre de su tiempo y de su tierra (…) se halla plenamente identificado con las modernas tendencias literarias que se dirigen hacia lo social y lo psicológico para desentrañar el enigma del hombre contemporáneo».
El investigador, poeta y narrador Ernesto Agüero reconoció que sus vínculos con Cascorro van más allá de su relación como escritor y laboral, sino también como el amigo que le abrió las puertas en su hogar.
Ponderó la preocupación de Raúl González de Cascorro por el desarrollo de la Uneac y los jóvenes. Lo definió como un escritor comprometido, de principios morales y fiel a la Revolución, mucho antes del 1ro de enero de 1959: «Toda su literatura -las obras de teatro y la narrativa- es un acercamiento a la realidad de Cuba desde el compromiso más hondo con su pueblo y testimonio de los problemas del país».
«Vamos a defender la memoria. Cascorro marca la historia desde la narrativa. Conocí al gran escritor, al ser humano de excepcionales valores, al educador, al extraordinario padre y al profundamente cubano».
El presidente de la sección de literatura de la Uneac en Camagüey, Jorge Santos Caballeros preponderó la obra testimonial de Raúl González de Cascorro antes y después del triunfo de la Revolución. «En los análisis históricos de Cuba existen cuatro maneras de ver la historia: la que se investiga y se hace ciencia, la que reconstruimos, la oficial y la historia para la docencia. Raúl tuvo la maravillosa idea de atrapar las ideas históricas contadas por los protagonistas que la vivieron y la llevo a la literatura. Mencionó, entre otros textos el libro Aquí se habla de combatientes y de bandidos».
Los actores Reina Ayala y Gaspar Sánchez King escenificaron fragmentos de la narrativa de Raúl González de Cascorro, entre ella la pieza teatral El hijo de Arturo Estévez (Premio Uneac, 1974) mientras que la cantante LiudmilaPardillo Pagan recordó al escritor – intérprete.
