Creado en: noviembre 10, 2022 a las 09:45 am.
La sección de Crítica e Investigación mueve los caracoles
Después de casi dos años de receso como consecuencia de la pandemia de COVID-19, que azotara a la mayor isla de las Antillas, la sección de Crítica e Investigación de la Asociación de Cine, Radio y Televisión (ACRTV) de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC), celebró en la sala «Villena» de nuestra sexagenaria organización cultural, la primera reunión con su membresía para tratar asuntos de vital importancia relacionados con el funcionamiento de la sección anfitriona.
Las palabras de apertura estuvieron a cargo de la cineasta Lourdes de los Santos, quien preside la ACRTV. La también documentalista y realizadora audiovisual esbozó los problemas fundamentales que han afrontado durante ese lapso la Asociación en general, y la sección de Crítica e Investigación en particular, así como la situación actual que encara la crítica artístico-literaria en los medios masivos de comunicación.
A tono con esa línea temática, la crítica y periodista Soledad Cruz, quien preside la sección de Crítica e Investigación, se refirió —entre otros temas de palpitante actualidad— a la situación que atraviesa, hoy por hoy, el martiano ejercicio del criterio desde la vertiente mediática, con la honrosa excepción de la crítica cinematográfica, que cuenta con disímiles espacios, sobre todo en la parrilla de programación de la pantalla chica insular, y en algunos medios de la prensa escrita (Granma, Juventud Rebelde, entre otros no menos relevantes).
Por otra parte, la reportera (jubilada) del diario de la juventud cubana destacó que, si bien en las redes sociales reflejan criterios acerca de la producción intelectual y espiritual de los creadores cubanos, dichos puntos de vista no están avalados por una sólida formación profesional, y, por ende, carecen de una buena apoyatura estético-artística; indicadores básicos indispensables que utilizan los colegas que ejercen el criterio en nuestros medios impresos y digitales de la prensa nacional.
En relación con esa candente situación problemática, Soledad Cruz hizo un llamamiento urgente para que los críticos de cine, radio y televisión tengan una participación mucho más activa en los cuestionamientos positivos o negativos a los espacios radiales y televisivos que oferta el Instituto Cubano de Radio y Televisión (ICRT), y que deben tener prioridad en las publicaciones periódicas (impresas o digitales)
En ese contexto, se discutió todo lo relacionado con la justa retribución económica que deben recibir quienes ejercen la crítica artístico-literaria por parte de los medios con los que colaboran regularmente.
A propósito, varios colegas hicieron uso de la palabra para plantear inquietudes y posibles soluciones a los principales problemas que inciden directamente en la calidad estético-artística de los espacios radiales y audiovisuales, para que sean capaces de captar la atención e interés de los jóvenes profesionales y estudiantes universitarios que se forman como futuros críticos culturales, y a quienes hay que ofrecerles las herramientas teórico-conceptuales, metodológicas y prácticas para que —en un futuro próximo— puedan incursionar, con excelencia artístico-profesional,en el vasto campo de la crítica artístico-literaria.
Para lograr tan loable objetivo, la Dra. Mayra Sánchez, profesora titular de la capitalina Universidad de las Artes (ISA), anunció la apertura de una maestría en Crítica en ese centro superior de enseñanza artística, y la Dra. Sahily Tabares dio a conocer el hecho de que estudiantes del último año de la especialidad de Periodismo en la Facultad de Comunicación Social de la Universidad de La Habana han asistido —sistemáticamente— al espacio mensual «Moviendo los Caracoles», ya que han estado formándose como periodistas culturales.
Dicha reunión fue presidida, además, por el Dr. Avelino Couceiro Rodríguez, el intelectual Juan Carlos Travieso, vicepresidentes de la ACRTV, y la Dra. Magda Resik, miembro del Ejecutivo Nacional de la UNEAC, y directora de la emisora Habana Radio, la Voz del Historiador de La Habana, y en ella participaron miembros activos de la sección de Crítica e Investigación, así como representantes de la prensa local.
