Creado en: junio 23, 2021 a las 06:40 am.

Ante la permanencia del bloqueo, la fuerza de la denuncia es fundamental

Este 23 de junio, cuando el canciller cubano Bruno Rodríguez Parrilla presenta para su votación en la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) el informe Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos de América contra Cuba, desde la UNEAC se condena también la injusta política que frena considerablemente el desarrollo de nuestra cultura.

Su presidente, el realizador audiovisual Luis Morlote Rivas, al explicar los efectos del cerco genocida en este ámbito de la sociedad, reafirma que ha sido severamente impactado, y entre los ejemplos que destaca, resulta el impedimento de nuestros escritores y artistas a difundir su obra y encontrar espacios en los Estados Unidos, mercado donde existe un interés evidente por la obra de nuestros creadores.

«El hecho de que no puedan establecerse intercambios bilaterales de la cultura, como expresión de la identidad de nuestros pueblos, es algo que ha signado desde su comienzo la política agresiva de bloqueo contra Cuba, pero también se han tenido afectaciones con los materiales que se requieren para la enseñanza artística, garantía de tener por años un movimiento cultural fuerte, pujante y vital como ha sido desde los inicios de la Revolución».

En este sentido dijo que es conocida la imposibilidad de adquirir materiales o tener que buscarlos en mercados muchos más lejanos, como partituras e instrumentos musicales.

«Yo recuerdo que en algún momento, cuando se tomaron algunas medidas que posibilitaron el intercambio cultural y permitieron que nuestros pueblos se conocieran más, la gira de los artistas cubanos fue importante para que se descubriera también la calidad del arte que se hace en la Isla, como pasó en el Kennedy Center de Washington DC., cuando el Festival Artes de Cuba».

«Eso es imposible hacerlo hoy con las restricciones del bloqueo y es imposible que nuestros artistas si tuvieran la posibilidad de presentarse en los Estados Unidos pudieran obtener ingresos».

Añadió Luis Morlote Rivas que en estos días de combate contra la Covid-19, donde se han hecho patentes las expresiones del arte cubano a partir de las redes sociales, se encuentran bloqueados los principales mercados digitales para los cubanos.

«Es imposibles que nuestras disqueras, nuestros músicos, nuestras galerías virtuales, puedan ingresar dinero y comercializar a partir del comercio digital, que es el orden del día hoy en la distribución del arte que se produce en el mundo».

También se refirió el artista al impacto de la política violatoria del Derecho Internacional en la producción científica cubana, desde las ciencias sociales, al no poder colocar dichos ensayos e investigaciones en los grandes circuitos de las editoriales estadounidenses. «Es imposible que estén a disposición del pueblo norteamericano, por eso el bloqueo los afecta a ellos también, quienes por demás no tiene la libertad de viajar a Cuba y de poder asistir a nuestros centros o espacios culturales de renombre internacional, o visitar nuestras galerías, estar en nuestros conciertos o en un recital de poesía».

El cine cubano ha sido ampliamente afectado, prosigue el titular de la UNEAC, «no solo por la imposibilidad de recursos para las producciones cinematográficas sino por la circulación de nuestro mejor cine, de la obra documentalística de nuestros creadores, reconocidas en el mundo entero, y que hoy no pueden exhibirse en los circuitos fílmicos de la nación estadounidense».

Pudiéramos enumerar disímiles ejemplos de cómo el bloqueo nos afecta, enfatiza Morlote, pero lo más importante es seguir denunciando esta política. «Es sumarse desde Cuba a los miles de amigos que en el mundo también nos apoyan, y convocar a aquellos, que aun sin ser simpatizantes de nuestro sistema social,  pero sí personas de buena voluntad, reconocen la injusticia de una política criminal que trata de asfixiar a un pueblo y provocar en él hambre y descontento, haciéndole más dura la supervivencia en estos tiempos de pandemia y crisis económica internacional».

«El hecho de que no se haya levantado ninguna de las medidas que la administración de Donald Trump impuso a Cuba es una demostración de que el bloqueo sigue intacto, por eso la fuerza de la denuncia es fundamental, para desnudar ante el mundo la criminal política».

Este día, dijo Morlote Rivas, tiene que ser de denuncia pero de fiesta también, porque la verdad del país será expresada otra vez mediante nuestra diplomacia.

«En la UNEAC, desde el compromiso eterno de la creación, los escritores y artistas cubanos unidos a los amigos del mundo, seguiremos exigiendo el cese inmediato del bloqueo».