Creado en: marzo 20, 2022 a las 08:56 am.

Cartelera habanera de 200 años, marzo de 1822

En la entrega correspondiente a la cartelera del mes de febrero de 1822, vimos que la temporada cómica se cerró el martes 19 de febrero, segundo de Carnestolendas, como estaba establecido en el mundo hispánico, en función de que la feligresía católica guardase el debido recogimiento durante el período de Cuaresma, algo más de seis semanas. En consecuencia, la actividad puramente teatral cesaba a partir del Miércoles de Ceniza. Con frecuencia los teatros eran entonces ocupados por artistas circenses, conocidos como volatineros o maromeros. No obstante, en algunas ocasiones se otorgaba licencia a algunos integrantes de las compañías de cómicos para que ofreciesen programas de música vocal y sinfónica. Y este es el caso de la Cuaresma de 1822. Ya el jueves 28 de febrero, los más destacados actores-cantantes de la compañía del Teatro Principal, junto a la orquesta, ofrecen el primer concierto de una programación de diez. En todos dirige la orquesta Manuel Antonio Coccó, violinista y compositor peninsular que está contratado desde 1819 y que se destacará en La Habana en esta y la tercera década del s. XIX por sus composiciones para los ballets de Andrés Pautret, coreógrafo al que dedicaré especialmente una crónica.

Consulté los periódicos Diario del Gobierno Constitucional de La Habana, El noticioso mercantil y El Indicador Constitucional.

MARZO

Domingos 3 y 10: Conciertos sinfónico vocales.

Martes12: Concierto sinfónico vocal. Se interpreta música de Pietro Generalli, Domenico Cimarosa, Gioachino Rossini, José Serrano y Manuel Antonio Coccó. Int: Mariana Galino, Isabel Gamborino, Nicolás Garcias Reyes, Juan Pau.

Jueves 14, Domingo 17 y Martes 19: Conciertos sinfónico vocales.

Jueves 21: Concierto sinfónico vocal a beneficio de la Casa de Beneficencia. 1ª Parte:

Obertura, de Étienne Nicolas Méhul [podría ser la de la ópera Los ciegos de Toledo, estrenada en 1820 por esta compañía]; de la ópera Tancredo, de G. Rossini, dúo por I. Gamborino y N. [Garcias] Reyes; variaciones para violoncello, por el profesor Enrique González: La mísera, de Sebastiano Nassolini, por M. Galino; gran concierto de violín a toda orquesta, por D. Toribio Segura. 2ª Parte: Obertura de Otelo, de G. Rossini; Aria de Tancredo, obligada a clarinete, por I. Gamborino; Dúo de Stéfano Cristiani, por M. Galino, I. Gamborino; Terceto de Madama Gaël [sic]  por M. Galino, I. Gamborino, N. Reyes; Fantasía española a violín, con orquesta, por D. Toribio Segura.

Domingo 24: Concierto sinfónico vocal. 1ª Parte: Obertura de Méhul;  Ferdinando Paër [no se especifica la composición]; Concierto para violín de Lafon [un afamado violinista de entonces] Int: T. Segura; Aria de Pietro Guglielmi, por M. Galino; Dúo de La novia impaciente, de Nicolas Dalayrac, por M. Galino, I. Gamborino. 2ª Parte: Obertura de Luigi Cherubini; Aria de Clarisa, de S. Cristiani, por N. Reyes; Terceto de Zara y Zefir, de P. Guglielmi, por M. Galino, I. Gamborino, N. Reyes; Concertante a dos violines, con todo  instrumental, de Rodolphe Kreutzer, por D. T. Segura y D. M. A. Coccó.

Lunes 25: Décimo y último concierto sinfónico vocal. 1ª Parte. Obertura de G. Rossini de La urraca ladrona; Dúo de La clemencia de Tito, de Wolfgang Amadeus Mozart, por I. Gamborino y N. Reyes; Concierto para violín de Jacques-Pierre Rode, por M. A. Coccó; Cavatina de G. Rossini, por M. Galino; Fantasía concertante a violín y guitarra con acompañamiento de orquesta, compuesta por D. T. Segura, quien ejecutará su parte en la guitarra, estando a cargo de D. Manuel Coccó la de violín. 2º Parte: Obertura de François-Adrien Böieldieu en El Califa de Bagdad; Cavatina de G. Rossini, por  N. Reyes; Dúo de Giovanni Paisiello en La Olimpiada, por M. Galino y N. Reyes; Variaciones sobre el minuet afandangado compuestas para violín con acompañamiento de orquesta, por Nicola Vaccai, y tocadas por el profesor Coccó.

Tancredo, de Rossini, se había estrenado en el Principal en 1818 con tal éxito, que a la fecha de esta Cuaresma contaba con más de veinte representaciones, algo verdaderamente extraordinario para la época; por su parte, La clemencia  de Tito, de Mozart, se había estrenado pocas semanas antes de finalizar 1821 y se ofrecieron cuatro funciones casi consecutivamente. Se trata sin duda de una programación exigente, dada la calidad de los compositores escogidos. No en balde la Compañía repite cada noche el elenco, integrado por cuatro intérpretes de probada experiencia: la soprano Mariana Galino, la mezzosoprano Isabel Gamborino y los primeros tenores Nicolás Garcias Reyes –también director escénico de óperas- y Juan Pau. Todos han protagonizado difíciles roles en el repertorio musical del Principal habanero

Otras interrogantes se nos plantean, como la de ese “minué afandangado”. Serán satisfechas en próximas entregas.