Creado en: mayo 13, 2023 a las 09:21 am.
Celebró la UNEAC el centenario del «Vecino de los Bajos»

Con el mismo desenfado de un humor criollo que apostó siempre por resaltar los auténticos valores de Cuba y su cultura, se desarrolló este viernes desde la sala Villena de la UNEAC, el homenaje a Enrique Núñez Rodríguez (1923-2002), en vísperas del centenario de su natalicio, el cual celebramos hoy a lo largo y ancho del país.
Inspirado en su pueblo Quemado de Güines, el de la pluma afilada y la eterna sonrisa, popularizó la crónica costumbrista en la página tres del Periódico Dominical Juventud Rebelde, desde 1987 hasta 2002, como se recordó en un panel integrado por el Premio Nacional de Periodismo José Martí, Pedro de la Hoz; el popular humorista Kike Quiñones; el presidente de Honor de la UPEC Tubal Páez y el presidente de Casa de las Américas, Abel Prieto Jiménez, quien lo describió como un cazador de seres anónimos. Su conexión con la cultura popular, dijo, le permitió abordar las peores circunstancias con humor.
“Enrique Núñez Rodríguez le dio trascendencia a lo pequeño, a lo diminuto, a lo que pudiera tener una mirada insignificante. En eso fue un gran descolonizador y optimista a prueba de cualquier contingencia y lo transmitió de una manera brillante, porque tú puedes destacar el optimismo en una crónica de forma retórica y encartonada, pero él no. Supo hacerlo de forma auténtica y creíble y la gente se lo agradeció infinitamente. Por eso fue esencial en aquellos años tan duros. Ahora tener un Enrique sería para nosotros esencial también”.
Cómo una persona muy criolla y siempre sonriente calificó Magda Resik a Enrique Núñez Rodríguez en en la celebración en la #UNEAC del centenario del autor. Abel Prieto, primer amigo de Enrique en intervenir, dijo que es necesario preservar su obra y su conexión con la cultura. pic.twitter.com/NaehDGtSpo
— UNEAC (@UNEAC_online) May 12, 2023
Durante el intercambio, el humorista Kike Quiñones, aseguró que lo mejor del teatro vernáculo cubano está en sus piezas Dios te salve comisario, El bravo y Sí, señor Juez, entre otras. “Lo local y lo nacional, lo mágico y lo divino atraviesan toda su obra”.
En ese mismo sentido, la popular actriz, Premio Nacional de Teatro y vicepresidenta de la UNEAC, Corina Mestre, afirmó que su incidencia en el género tiene que ver con lo que era como ser humano. “(…) Un cubano raigal, un hombre que nunca hizo distinción con ninguna persona, que le gustaba siempre conversar lo mismo con un alto intelectual que con el barbero o bodeguero de su pueblo, y con una característica muy especial del verdadero cubano: el choteo, como lo denominó Jorge Mañach (…)”.

Por su parte, los periodistas Tubal Páez y Pedro de la Hoz conversaron de su cubanidad y sentido político, al ser Núñez Rodríguez un melómano, hombre también de la radio y la televisión, como destacó en sus palabras el presidente de la UNEAC y realizador audiovisual, Luis Morlote Rivas.
“(…) Fue un personaje imprescindible en cada espacio por donde transitó. Él entendió que defender la cubanía y la Patria, empezaba por el pedacito donde uno vive, en su caso Quemado de Güines, donde era y es un ídolo (…)”.

En la sala Villena a través de sus lectores, Enrique Núñez volvió a provocar la risa y conspiró su memoria para disfrutar de otros detalles, como la excelente y siempre bien recibida interpretación de Beatriz Márquez, quien se hizo acompañar del poeta Miguel Barnet, presidente de honor de la UNEAC, en uno de esos momentos únicos donde aflora lo mejor del arte.

Recordó Barnet que Núñez Rodríguez sentía una inmensa afinidad por la cultura popular y las esencias de la nación, por lo que sorprendía su modo de comunicarse con la gente y los jóvenes.
A cien años de su natalicio, sigue siendo un juglar moderno.