Creado en: diciembre 4, 2022 a las 10:41 am.

Jesús Heriberto Cruz: La UNEAC avileña es como una gran familia

Jesús Heriberto Cruz Rodríguez es un activista por excelencia. No por gusto es el Especialista principal en el Departamento de promoción del comité provincial de la UNEAC en Ciego de Ávila. Su ansiedad orgánica lo lleva a convertirse en un hombre muy activo que no le teme ni a su estado de salud, ni a las adversidades.

Se le ve siempre sonriente. Con la cabeza baja, como buscando concentración en el suelo, camina por los pasillos de la casa vanguardista y pareciera que lo abrumara el exceso de reuniones a pesar de la ausencia de actividades culturales en la casa.

Cada día que pasa, Jesús entiende que el arte salva, porque hablar de proyectos, peñas, espacios teóricos, futuro, es motivación y consuelo.

Jesús se codea con los artistas de cada filial y los va calando tanto en lo físico como en lo espiritual. Así va estudiándolos para luego saber cómo tratarlos. Es una manera inteligente de ser comunicativo y empático.

Su día a día se resume en reuniones. Pareciera un dirigente o funcionario. Casi nunca se le ve perder la tabla. Como mediador entre cuestiones humanas y subjetivas, tiene un rol preponderante y sabe maniobrar el escenario por muy caldeado que esté.

Aunque su vínculo con el arte y la cultura es como un hilo de araña, tiene sensibilidad suficiente como para ponerse del lado del artista, del que sufre más, y poder sacar sus propias conclusiones, y ser útil. Es un hombre justo. Merece toda la honra que se le pueda ofrecer.

En estos días de encuentros preparatorios a las actividades por el 50 aniversario del Movimiento de la Nueva Trova, y el 35 de fundado el Comité Provincial de la UNEAC avileña, se le ve sacando optimismo de donde pareciera no haber. Seduce y convence. Promociona y desea que todo salga como está planificado. Pero sabe que la opinión del artista siempre será compleja y permeada por muchos resortes subjetivos y afectivos.

¿Qué otros espacios laborales has ocupado antes de entrar a laborar en la UNEAC?

Durante muchos años, fui maestro primario, licenciado en educación primaria y de ahí ocupé varias responsabilidades, cuadro político, cuadro de masa, y en organismos que dirigí muchos años.

¿Qué es lo novedoso?

Para mí lo nuevo es lo que uno ha aprendido aquí. Todo es diferente y cada día aprendes algo y cuando estás en relación con los artistas te nutres de un caudal de conocimientos inagotable. Es infinito el trabajo del promotor y del comunicador porque es tanto lo que se puede decir y hacer diariamente.

Esa doble función de padre y promotor, ¿cómo lo llevas?

Por el apoyo de la familia, mi esposa, mis hijas. Somos una familia unida. La traemos para acá o siempre está cerca de nosotros. A veces le damos una vuelta si está lejos y regresamos al trabajo. Aquí no se tiene horario para hacer todo lo que se necesita. Uno se levanta desde por la mañana, y hasta altas horas de la noche está trabajando. Cuando no estás trabajando en las redes o visionando esa labor, estás revisando documentos, mirando; estás siendo partícipe de lo que está pasando en el entorno.

¿Qué es lo que más te gusta de trabajar junto y por la vanguardia artística?

La UNEAC es como una familia en donde uno se siente y está protegido. Te ayudan a olvidar un poco la dura realidad. Y a ser más cubanos.

¿Qué es lo que menos te gusta de trabajar aquí?

Una pregunta de respuesta realmente difícil ¿No? Porque tratamos de que lo que no nos guste, resolverlo; tratamos de mediar, de ayudar, de apalear el problema, de subsanarlo. Se sabe que en todos los lugares nos vamos a encontrar con tropiezos y esos tropiezos se van enderezando poco a poco. Luchar contra esas cosas es como un antídoto contra la insatisfacción.

¿Consideras que has crecido como ser humano, como admirador del arte?

Sí, nos falta mucho porque realmente uno está insatisfecho diariamente cuando ve una obra o se da cuenta de que desconoce muchas cosas. Pero la vida es muy rica y siempre da posibilidades de estudiar, de prepararse, de crecerse porque hay cosas que son inalcanzables. Mas, uno trata de emparejar las cosas, de buscar el nivel para poder superarse y estar a un nivel un poquito más alto cada día.

Para este cuatro de diciembre, que cumple 35 años de creado nuestro comité provincial, ¿Qué se ha preparado?

Un programa amplio que ha salido a través de las redes y ha salido a través de los medios de difusión del territorio. Un programa de actividades con los locutores por el día del locutor en la ciudad de Morón, en la fundación Nicolás Guillén. En saludo al 50 aniversario del Movimiento de la Nueva Trova hay un plan de actividades en la galería Asagaya de nuestra instalación, un panel de ponencias sobre la nueva trova en donde se van a exponer trabajos y donde van a participar los de la AHS, miembros y varios artistas. Habrá dos galas donde van a participar artistas nuestros y otros invitados.

¿Cómo tú ves el crecimiento de este comité provincial en este año?

Ha sido un proceso trabajoso para nosotros, pero ha estado lleno de virtudes y desaciertos. Hay un grupo importante de jóvenes que ingresan desde la AHS. Hoy tenemos alrededor de veinticinco miembros que fueron aprobados y que realmente tienen que dinamizar la vida orgánica de la organización. Recuerda que tuvimos varios fallecidos en tiempos de COVID-19 y otros que se han trasladado hacia otros lugares.

¿Te puedes imaginar un futuro en donde no trabajes aquí?

No he pensado ni en la jubilación. Porque, bueno, acabo de cumplir cincuenta y ocho años y uno todavía tiene mucho que vivir y aprender. Y en caso de que sucediera el salirme de aquí… no sé, siempre regresaría a dar una vuelta. Acá me siento como de la familia, porque esto es una gran familia.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *