Creado en: septiembre 10, 2022 a las 04:26 pm.

La Uneac rinde tributo a Juan Almeida en el aniversario 13 de su partida física

Por José Vázquez Ferreiro

Afable, jovial, valiente, exigente y campechano. Muchas fueron las cualidades de Juan Almeida Bosque, hombre de raíces humildes y amado por todo un pueblo, quien partió físicamente el 11 de septiembre de 2009. Con motivo del XIII aniversario de la muerte del destacado líder la Sala Villena acogió un conversatorio sobre su vida y obra.

En el encuentro fue proyectado un audiovisual y el presidente de la Asociación de Escritores de la Uneac, Alberto Marrero, aseveró que los cubanos crecidos con el proceso revolucionario lo recuerdan como una figura cimera. Fue un hombre que tuvo tiempo para su trabajo y también para escribir y componer.

El escritor e investigador Heriberto Feraudy relató sus encuentros con Almeida. Lo recordó como una excelente persona, protagonista de muchas anécdotas que lo hicieron merecedor del cariño y el aprecio de todos por ser un hombre sencillo y de tanta grandeza.

Al Almeida escritor y el valor testimonial de su prosa se refirió Pedro de la Hoz, Vicepresidente de la Uneac, quien además resaltó las facetas de creador y compositor.

El escritor y diplomático Oscar Oramas rememoró a Juan Almeida como arquitecto de puentes de amistad entre Cuba y varios países. Destacó que el Comandante de la Revolución siempre estuvo atento a todos los detalles y poseía conocimiento de todo lo que le concernía en cuanto a Relaciones Internacionales.

Al homenaje tributado por la Uneac a Juan Almeida Bosque con motivo del aniversario 13 de su partida física asistieron Luis Morlote Rivas, Presidente de la Organización, el combatiente Víctor Dreke y familiares, amigos y personas allegadas. Juan Antonio, uno de los hijos, agradeció haber estado en un espacio donde fue evocado el hombre, el padre, el ser sentimental amoroso y sensible.

El encuentro no podía cerrar de otra manera que no fuera con su música, esta vez interpretada por el Maestro Emilio Morales al piano, quien ejecutó la pieza “Mejor diciembre” y luego acompañó a Ana Iris Blanco en la emblemática canción “La Lupe”.

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