Creado en: diciembre 24, 2022 a las 11:13 am.
Luciano Castillo: un apasionado del cine
La provincia de Camagüey tiene el privilegio de saberse cuna de Luciano Castillo Rodríguez, un hombre que, sin ser actor, guionista o director, es una personalidad cinematográfica.
Su pasión por el Séptimo Arte nació a muy corta edad, de acuerdo con una entrevista publicada en el canal de YouTube de Casa América, en la que aseguró. «La primera vez que entré a una sala oscura me envenené con el virus del cine, y cada día se agrava más».
Como pocos, el crítico de cine y ensayista, uno de los investigadores más serios y acuciosos del cine de factura nacional, ha avivado su interés por preservar el pasado de la gran pantalla. De ahí partió la idea de publicar la Bitácora del cine cubano, donde se recoge la Historia del Cine en Cuba.
«Me apasiona la historia de nuestro cine, el cual ha sufrido tantos embates. Está llena de luces y de sombras, que es necesario restaurar para las nuevas generaciones de espectadores y estudiosos», sentenció el director de la Cinemateca de Cuba, autor de textos como La verdad veinticuatro veces x segundo, Carpentier en el reino de la imagen, y El cine cubano a contraluz, entre otros textos de referencia para los amantes del arte.
«Se han restaurado algunos de los grandes clásicos cubanos, un trabajo en el que se ha logrado tal grado de perfección, que es sorprendente. Es como si se viera por primera vez», expresó con un brillo en la mirada, al mencionar entre los rescates la cinta Lucía, de Humberto Solás. «Parece que se filmó hoy, aunque con toda la pasión de los años 60», añadió.
Asegura el escritor cubano Daniel Céspedes Góngora que Luciano «es uno de los pocos que, al valorar una película, uno no espera que ofrezca pronto argumentos, no por incapacidad, sino porque su parecer emana de una experiencia audiovisual enorme que lo defiende y legitima».
El Máster en Cultura Latinoamericana, miembro de la Asociación Cubana de la Prensa Cinematográfica, y quien fuera, durante veinte años director de la Mediateca André Bazin de la Escuela Internacional de Cine y TV de San Antonio de los Baños, ha compartido sus saberes a través de la pantalla chica, a través de entregas como Claqueta, de Televisión Camagüey y De cierta manera del Canal Educativo.
El Premio de Periodismo Cultural Orlando Castellanos en concurso Videncia (2005), quien no se cansa de ver desde la primera hasta la última de las imágenes del filme cubano La última cena, de Tomás Gutiérrez Alea, «vive el cine con una pasión incontenible que le hace vivir a plenitud». Y aunque admite que el Teatro fue su «primer amor», confirma que es el Séptimo Arte el que le hacer palpitar sus adentros a la velocidad de un fotograma, el que no puede faltarle ni un día en su pródiga vida.
