Creado en: mayo 23, 2021 a las 07:27 am.

Yanet Alfonso Valdés: legado a la UNEAC desde los medios

De izquierda a derecha: Yanet Alfonso Valdés, Bruno Suárez Romero, Avelino Couceiro Rodríguez y Maya Quiroga./Foto: Cortesía de Bruno Suárez

Ya presidía la sección de Crítica e Investigación de la Asociación de Cine, Radio y Televisión de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac), cuya actual presidenta Lourdes de los Santos me sugirió estas cuartillas (que ya yo sabía que eran necesarias; merece mucho más) cuando la conocí: era de los nuevos miembros que habían ingresado en el año 2016, y consecuente con mis principios de dirección (aunque mi vocación dista mucho de dirigir nada) de conocer profesional y humanamente lo mejor posible a cada persona del colectivo que atiendo, también fui descubriendo. 

Nacida el 25 de septiembre de 1971 en Los Pinos (Arroyo Naranjo, La Habana), donde siempre vivió, era Licenciada en Historia e hizo su Servicio Social en el Archivo Nacional, pero ya entre 2003 y 2005, comenzó a liderar el grupo de investigaciones sociales de Radio Rebelde, aportando investigaciones tan importantes y novedosas como aquella sobre orientación sexual para el espacio “Solecito mañanero” en Haciendo Radio, en la revista informativa de la mañana. Iban a las escuelas y pedían permiso a los padres para estudiar los criterios de los niños entre 4to. y 6to. grado sobre esos programas, entre ellos, por ejemplo, aquel niño con dos mamás que eran una pareja de mujeres. De tales pesquisas resultaron ponencias para eventos a nivel de radio, y luego a emisoras provinciales y que ya comenzarían a repercutir en la vida y visión de la Uneac.

Escribía segmentos dentro de programas e ingresó en la Unión de Periodistas de Cuba (Upec), a la par de sus importantes investigaciones para radio y luego, para televisión. Hizo una Maestría, y comenzó en televisión como asesora en la redacción de Dramatizados, y con un marcado interés en especialidades de producción que estudió, se fue formando como asistente de dirección, para una visión profesional más completa. En la sección de Infantiles y Juveniles, asesoraba también musicales, animados, o didácticos, y más allá, teleplay y cuentos, y escogía espacios de telecentros, programas y capítulos, para la televisión nacional.

Fue asistente de producción en la filmación en Cuba de la película estadounidense Rápido y furioso, con un megáfono en la calle atendiendo a todo el personal congregado para la ambientación de la cinta, en el Malecón y en la Habana Vieja, por la Terminal de trenes.

En un círculo de interés del Palacio de los Pioneros fundó una especialidad de radio en la zona donde vivía y alguna secundaria del Vedado, adolescentes que formaba en las diversas artes radiales: locutores, directores, escritores, y a algunos de ellos los llevó a la Uneac, cuando la convocamos a los debates teóricos del Concurso Caracol y en otros eventos, donde fue una de las que aportó niños y jóvenes para que ellos mismos lideraran la polémica sobre la programación en los medios; era una obra más, dada su gran capacidad de gestión de tiempo para atender las escuelas; aporte invaluable que ha trascendido en la memoria histórica del Caracol.

Fue asistente de dirección en dos documentales que dirigía Bruno Suárez Romero, guionista y director de radio y televisión y actual vicepresidente de la Asociación de Cine, Radio y Televisión de la Uneac, que la había acogido al iniciarse ella en el Instituto Cubano de Radio y Televisión (Icrt) donde la vio crecer, y a quien se le agradece su entrevista, indispensable para estas líneas.

Uno de estos documentales con Guillermo Piñeiro se dedicaba a los 80 años de la orquesta Aragón, y otro a los 50 de los Van Van. Para el mismo Bruno y en televisión, asesoró dos proyectos para adolescentes: Zona jam, con bandas musicales de jóvenes tocando en vivo para el verano de 2017 en Cubavisión, previsto a estrenarse en octubre, producción del Grupo Creativo Infanto-Juvenil de Animados de la Televisión al que ella pertenecía; y Canta tus derechos, con los niños y adolescentes interpretando temas sobre sus propios derechos, idea suya como asesora que convocó a Bruno como guionista y director, y que de manera experimental, tuvo su primera temporada en 2018, para promover a los adolescentes ganadores en canto e interpretación del concurso Por un mundo al derecho, del Ministerio de Justicia; grabaron a los tres finalistas y recrearon la labor del Centro de Referencia A+ Espacios Adolescentes, adscrito a la Oficina del Historiador de La Habana (talleres, preparación artístico-cultural y enseñanza de oficios).

Foto tomada del Portal de la Televisión Cubana

Aprobada la propuesta de Yanet y Bruno, sobre todo desde el punto de vista conceptual, con opiniones de niños y adolescentes, en el verano de 2019 tuvo su segunda temporada en Cubavisión, espacio de 12 minutos saludando el aniversario 30 de la Convención de los Derechos del Niño y el Adolescente. Hubo algunas filmaciones en los Estudios Scorpio y PM Récord, y nació la idea de grabar un fonograma.

En la primera temporada grabaron el sonido directo de los cantantes acompañados de grupos de pequeño formato, muy complejo para todos, pues debía lograrse en una o dos tomas para después editarlo, y se ideó un playback completo grabado en un estudio para doblar las canciones, a través de la Empresa de Grabaciones y Ediciones musicales Egrem, y en lo que se concentraron Mailán Ávila, directora del Coro Solfa, y la musicóloga Élsida González. Yanet y la otra asesora (Penélope Obregón) seleccionaban los posibles temas y los sugerían a la mayoría de los futuros compositores e intérpretes, y tras los arreglistas e ingenieros de sonido, se logró el disco Canta tus derechos, con producción musical de Ávila, músicos profesionales y estudiantes de la Academia, uno de los 87 álbumes de la Egrem, que fue nominado en la categoría de música para niños a la XXIV edición de los Premios Cubadisco 2020-2021.

Parte de la banda sonora del espacio, era un reconocimiento importante para todos y, en especial, post-mortem, para quien tuvo la idea original, su asesora y gestora, motor impulsor que buscó y encontró a cada uno de los cantantes y a las dos agrupaciones básicas que les acompañó: el Solfa, y el proyecto Voces, de Vivian Montané: Yanet Alfonso Valdés.

Este disco con personalidad y diseño propios, notas discográficas de Regla Bonora y Mailán Ávila, según Maya Quiroga en su artículo Del programa de televisión al Premio Cubadisco, es punto de partida para obras musicales escritas y defendidas por niños y adolescentes donde aborden sus derechos, con once temas y un Bonus Track, y todas las piezas interpretadas por sus autores, excepto el corte número ocho.

También asesoró un espacio de animados históricos en televisión en producción, que sacaba sus primeros capítulos sobre nuestras gestas independentistas y figuras como Martí y Céspedes.

Dados los resultados de sus investigaciones viajaba a eventos en México, y asesoraba en Radio Taíno el programa científico técnico SOS Planeta que escribe el cineasta Ernesto Daranas Serrano (de lunes a sábados, de 4 a 4.30 pm), ya premiado en el Festival Nacional de la Radio y en la CBU (organización de la radio y televisión caribeñas), cuando tuvo que ser operada, pero la metástasis se impuso a su mucho valor, dignidad y discreción, hasta su deceso el 13 de noviembre de 2020, con 49 años.

Ya era plena pandemia, época difícil, para mí mortal; atontado de los golpes no podía creer qué había pasado con Yanet, con quien ya contábamos como brazo derecho para la Asociación, al menos ya para interactuar con niños y jóvenes.

Y aun no lo creo: cada vez que veo adolescentes debatiendo, ahí al frente, como una más, lidera entusiasta aquella inquieta mulatica menuda, siempre dispuesta, dulce, receptiva, carismática, emprendedora, creativa, valiente… tan risueña como inteligente, reflexiva, profunda y capaz.

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